La tienda del señor Guillermo
La tienda es pequeña y se encuentra en un callejón estrecho de la parte vieja de la ciudad. Puedes pasar por delante y no verla: una puerta de madera oscura, unos cristales que el tiempo ha vuelto opacos. Si entras te atenderá el señor Guillermo, divertido y jovial. Te pedirá algunos hilos rojos, o el olor de una tarde de tu infancia, o tu sueño de anteayer. Si llegáis a un acuerdo, mantén tu palabra. Él te dejará buscar por la tienda, y llevarte lo que quieras; la sonrisa del hijo que perdiste, el beso de quien no te amó...
martes, 11 de noviembre de 2008
LA TIENDA
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Buf... esta no me atrevo a contestarla, ¡tendré que pensarla!
ResponderEliminarLo tengo claro: Un guiño por una sonrisa o viceversa.
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